El Mondongo en Candilejas es tradición y sabor en cada cuchara
El mondongo es mucho más que un plato típico en la gastronomía antioqueña; es un símbolo de tradición, reunión familiar y sazón que trasciende generaciones. Este plato, con su característico aroma y rico sabor, ocupa un lugar especial en las mesas de Antioquia y en el corazón de quienes lo disfrutan.
Historia y Orígenes
El mondongo, como muchos platos tradicionales colombianos, tiene sus raíces en las costumbres campesinas, donde se aprovechaban al máximo los ingredientes disponibles. Este estofado, preparado a base de callo (el estómago de la res), vegetales frescos y especias, surge como una comida nutritiva y económica, ideal para alimentar a familias numerosas después de largas jornadas de trabajo en el campo.
Con el paso del tiempo, el mondongo se transformó en una delicia infaltable en reuniones familiares, celebraciones y hoy por hoy en los menús de restaurantes tradicionales. Su popularidad se debe no solo a su sabor, sino también a su capacidad de unir a las personas en torno a la mesa.
Ingredientes y Preparación
El secreto de nuestro mondongo está en su preparación detallada y en la selección de ingredientes frescos. Los ingredientes principales incluyen:
• Callo (mondongo): Minuciosamente lavado y cortado en trozos pequeños.
• Papa y yuca: Aportan consistencia y un toque de cremosidad al caldo.
• Plátano verde: Un toque característico que equilibra los sabores.
• Caldo base: Preparado con carne de cerdo o hueso de res para enriquecer el sabor.
• Especias y hierbas: Cilantro, comino, ajo y cebolla, que potencian el aroma del plato.
En Candilejas empieza el proceso de preparación comienza con la limpieza exhaustiva del callo, que se cocina hasta lograr una textura suave y tierna. Luego, se incorporan las verduras y las especias en el caldo, dejando que los sabores se mezclen a fuego lento. El resultado es un caldo espeso, reconfortante y lleno de sabor.
Conclusión
El mondongo es mucho más que un guiso; es un reflejo de la identidad antioqueña, una muestra de cómo la cocina puede ser un puente entre el pasado y el presente. Su sabor inconfundible y su capacidad de reunir a las personas lo convierten en un plato que trasciende el tiempo.
¡Así que, que te invitamos a que vengas y pruebes nuestro delicioso mondongo casero, recuerda que estás disfrutando de una tradición centenaria llena de sabor, historia y cariño!
Te esperamos.
